La concejal indígena Ati Quigua, celebro hoy el día Mundial del Agua, creando para su protección la “Red de Hijos del Agua”, ya que según estadísticas en 20 años, el 70% de los colombianos sufrirán por su carencia, motivo por el cual instaló en la plazoleta interna del Cabildo de Bogotá una fuente que será el símbolo de la defensa del preciado liquido y de su iniciativa “el Estatuto del Agua para la ciudad”, con el que ella propone un marco jurídico para proteger y preservar su ciclo natural; además, solicitó no dar en concesión el sistema Chingaza y salvar las quebradas de Mochuelo Alto de la localidad de Ciudad Bolívar.

Según, la cabildante Quigua, sería nefasto para los colombianos entregar al sector privado, en explotación ecoturística, el Parque Natural Chingaza; pues de esta fuente hídrica se abastece el 35% de los colombianos, unos 8 millones de personas, entre ellos el 90% de los capitalinos. Esto incidiría en el deterioro de la capacidad de almacenamiento de la vegetación del lugar y se vería reflejado en la calidad del agua. Cabe destacar que Chingaza comprende 76 mil hectáreas, de las cuales 35 mil son de la empresa de acueducto y sólo 500 son del Ministerio del Medio Ambiente, quien lo daría en concesión.

Igualmente, considera que es imposible darnos el lujo de contaminar y dejar desaparecer las quebradas de Mochuelo Alto, con las que se abastecen por lo menos 300 familias, por causa de la ampliación del relleno sanitario Doña Juana, las cuales además, se vienen secando como consecuencia de las excavaciones que a profundidad se están adelantando en este lugar. Afirmó la indígena.

Para exaltar su acto simbólico, la cabildante Ati Quigua, traslado a la corporación tres burros que cargo con vasijas de barro, llenas de agua, para evocar la forma en que anteriormente se trasportaba el liquido, mismos que son usadas en sectores muy deprimidos de la capital y en algunos sitios del país. Al evento asistieron integrantes de las comunidades Inga y kichwa y alumnos del colegio Cecil Redil, ante quienes la cabildante leyó un manifiesto de 13 puntos, mediante el cual pidió a la ciudadanía se comprometa a respetar, reconocer y honrar el agua como elemento sagrado que sostiene la vida.