El Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial de Naciones Unidas manifestó preocupación por la persistencia de graves violaciones de los derechos humanos cometidas contra los afrocolombianos y los pueblos indígenas, como asesinatos,ejecuciones extrajudiciales o reclutamientos y desapariciones forzadas.
A pesar de que el Comité mencionó primero algunos aspectos positivos como la existencia de legislación interna que consagra el principio de no discriminación y reconoce los derechos de los grupos étnicos y la jurisprudencia de la Corte Constitucional al respecto (párr. 13), expresó varios motivos de preocupación y formuló recomendaciones en relación con los siguientes temas:
• La persistencia de graves violaciones de los derechos humanos cometidas contra los afrocolombianos y los pueblos indígenas, como asesinatos, ejecuciones extrajudiciales o reclutamientos y desapariciones forzadas. Resaltó al respecto que “si bien los grupos armados ilegales tienen una importante responsabilidad en esas violaciones, se sigue denunciando la participación o la colusión directa de agentes del Estado en esos actos y que algunos miembros de las fuerzas armadas han estigmatizado públicamente a las comunidades afrocolombianas e indígenas” [1] (párr. 14).
• La ausencia de autoridades civiles en zonas altamente militarizadas y la ineficacia del Sistema de Alertas Tempranas (SAT) para prevenir violaciones por parte de los diferentes grupos armados en contra de las poblaciones afrocolombianas e indígenas en situación de riesgo (párr. 15).
• El creciente desplazamiento forzado de afrocolombianos e indígenas y el incumplimiento de las sentencias y autos de la Corte Constitucional en esta materia (párr. 16).
• Los importantes obstáculos, incluso por medio de la violencia en contra de líderes, al ejercicio del derecho al territorio (párr. 19).
• La violación frecuente del derecho a la consulta previa de los pueblos y comunidades afectadas por megaproyectos (párr. 20).
• La ausencia de acciones afirmativas y medidas de política pública dirigidas a mejorar la situación estructural de marginación y discriminación de facto de la población afrocolombiana y los pueblos indígenas que no gozan en condiciones de igualdad de sus derechos, en particular sus derechos a la vivienda, educación, acceso a servicios públicos, y salud. Entre las preocupaciones más importantes se encuentra la falta de implementación y la ausencia de monitoreo de la ejecución de políticas públicas dirigidas a mejorar la situación de marginalidad en que se encuentran estos grupos (párr. 24).
• La ausencia de información detallada y diferenciada, que es obstáculo para la creación e implementación de acciones afirmativas y políticas públicas (párr. 24).
• La ausencia de legislación penal anti-discriminación (párr. 14). • La persistente discriminación en el sistema de la administración de justicia (párr. 21) y en el acceso a establecimientos públicos y privados (párr. 26). • El riesgo de extinción que afecta a varios pueblos indígenas [2] (párr. 25). • La ausencia de medidas efectivas que garanticen el derecho a la reparación, incluso la restitución de las tierras (párr. 17).
Estas nuevas conclusiones del Comité muestran el incumplimiento flagrante del Estado colombiano con sus obligaciones internacionales. Por lo tanto, invitamos a la población colombiana y a la comunidad internacional a urgir al Estado colombiano a que implemente las nuevas recomendaciones que, de ser cumplidas, contribuirían a mejorar sustancialmente la situación de discriminación racial que sufren a diario y en carne propia los pueblos indígenas y la población afrocolombiana.
Las observaciones y recomendaciones se encuentran disponibles en la página web del Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial de Naciones Unidas